El niño que cuenta esta historia lleva una semana sin ir al colegio ni salir del apartamento donde vive con su madre periodista, su padre que no hace más que mirar la tele, su hermana pequeña y su perro, Asterión. Un día su madre no vuelve del trabajo, al otro les cortan el agua, y luego la luz. La comida comienza a escasear. “La cosa está peor afuera” dicen, así que a este niño no le queda más que escribir en su cuaderno y jugar con su imaginación… hasta que algo cambie el curso de las cosas.